Hipersensibilidad a las quinolonas y a la hidrocortisona. En pacientes con perforación de la membrana timpánica, infecciones micóticas y/o enfermedades malignas del oído.
No se administre durante el embarazo o cuando se sospeche su existencia, ni durante la lactancia. En caso de ser imprescindible su uso por no existir otra alternativa terapéutica, suspéndase la lactancia materna.